Un hecho insólito en la economía.
Se anunció que desde diciembre hasta marzo habrá un congelamiento de precios en 1.500 productos. Lo sorprendente es que las empresas no lo sabían pero les dan un tiempo para que suban los precios en forma preventiva y armen un colchón.
Incluso, pensaron que estaba descartado porque nunca funcionó a lo largo de los siglos.
Pero el temor a que la inflación se desborde mucho más por el plan platita, hizo que se recurra a esas viejas medidas.
Nadie tenía contactos con el secretario Matias Tombolini. Este pretendía que llevarán impresos los precios en los envases para que el programa llegue a todos los canales de comercialización (almacenes, autoservicios, comercios de cercanía).
Las empresas señalaron que es inviable.
Estamos frente a un gobierno que está desesperado por la inflación; la necesidad de poner plata en la calle – muchas paritarias van por el 100 % – y en el avance en las tarifas de luz, agua, gas, nafta y gasoil.
Esto podría servir cuando la inflación está en el 30 o 40 % anual. Nunca cuando está en el 100 %.
Cuando la suba de los precios tienen ese avance, los valores se actualizan por lo menos una vez por mes. Es imposible sostener un precio durante 30 días en este contexto.
Esto termina en conflictos y desabastecimiento.
¿Por qué lo hacen?
¿Massa no cree en el congelamiento?
Como no lo pueden resolver, hay que buscar un culpable. Cómo no va a funcionar, organizan marchas, aplican multas y escraches.
Posiblemente algún detenido.
No es la primera vez que pasa en un gobierno autoritario.
Es cierto que los alimentos vienen subiendo más que la inflación promedio. Canastas reguladas, precios cuidados. Está todo inventado y siempre fracaso. En ningún país limítrofe existen esa clase de controles y no hay inflación.
Además, no hay un ancla para frenar la suba de precios.
Antes, era el dólar oficial, pero ahora no lo quieren dejar atrasar y en octubre se devaluó 6,5 %, al mayor ritmo de los últimos 38 meses.
El agro solo liquido 1.200.- millones de dólares en el mes.
Un informe de la UIA muestra que solo un 12 % de los pedidos de importación fueron aceptados en 30 días.
Hay una realidad, se cerró la caja. No hay dólares.
Si queres importar, dice Massa, usa los tuyos en blanco o en negro, no te van a preguntar.
Un nuevo blanqueo.
Si una empresa tiene dólares no declarados, una forma de ingresar de manera formal al mercado será a través de importaciones.
¿Cuál es el costo?
Duplica el dólar oficial pasó de 156.- a 307.- pesos del contado con Liquid. Ese aumento va al precio final.
Todo es para no devaluar.
Falta conocer hasta donde llega el efecto sequía. En trigo son 2.500.- millones de dólares.
Hasta marzo del 2023 no hay dólares para nadie. Después llegara la soja.
Hay miedo en el gobierno a una corrección cambiaria. Ven todo muy frágil y Alberto cree que está en el paraíso y va por la reelección.
En abril del 2018, el mercado decidió no financiar más a Macri y vino el tsunami.
El próximo semestre habrá inflación alta, varios tipos de cambio y la actividad estancada.
El mercado, hasta cuando financiará al gobierno.
Sabe que la estrategia es enmascarar los hechos con ocurrencias dialécticas generalmente teñidas de ideologismo y simplificaciones.
Lo que está claro es que se están viendo señales de que la economía empieza a recesionar. Son falta de dólares, empieza el ajuste, año que viene electoral. Todo un combo complicado.
No hay plan de estabilización.
Solo se les ocurre el congelamiento por 4 meses.
En política Massa se puso al lado de Cristina y pide la suspensión de las PASO. Lo hace porque las dificultades económicas son muy serias, la inflación lo desborda y necesita apoyo político.
Mientras tanto, los datos oficiales nos muestran: no se aguanta un impuesto mas.La única solución es bajar el gasto público.
Si, se observan las discusiones y nadie dice qué hacer con ese tema.¿Es por temor, por ignorancia, por que si lo dicen pierden apoyos, no están seguros, no saben?
Eso sí, candidatos a presidente, sobran. Lo que no sabe es para que