Las palabras de Papa Francisco pasaron casi inadvertidas : “Detrás de las crisis en América hay gobiernos débiles”. “Así no consiguen paz y orden”.
Comparo lo que ocurre ahora con la época de 1974 – 1980.
¿Estamos ante un profundo cambio de época?
Los gobiernos débiles – según el Papa – ¿son las democracias burguesas?. ¿Prefiere los populismos?
Para algunos lo que está en crisis entre otras cosas son : la familia tradicional, la empresa como ámbito de desarrollo de una carrera profesional, Las Iglesias como refugio espiritual , los sindicatos como representantes , los partidos políticos. Por supuesto también el Estado.
En las fotos donde hablan hoy los líderes , aparecen los uniformes de los militares . Venezuela, Ecuador, Chile, Bolivia. ¿Vuelven las épocas donde muchos políticos golpean las puertas de los cuarteles?
La oposición , aplaude el ingreso de los uniformes para expulsar gobiernos a los que consideran ineptos , corruptos o una amenaza para las instituciones democráticas .
La intervención militar , declararon en cada caso , fue un medio para defender la democracia.
Aparecen discursos desde el populismo de izquierda y de derecha . Según ellos , “las democracias están podridas”. “Se necesita disciplina y mano dura, cauterizando las partes enfermas”.
Los intelectuales sacan la conclusión de que la familia como organización universal ha fracasado. Con la democracia apuntan a que es imperfecta y el capitalismo está en decadencia.
La idea, sacrificar la libertad para que llegue el orden.
No hay acuerdos ni convivencia. La guerra verbal, la orgía de rencor dará paso a otras manifestaciones .
Argentina es el país del populismo eterno.
Así se observó en las declaraciones furiosas de Cristina Kirchner.
Por encima de la ley : todo – solo existe la voluntad del caudillo. Nunca, el jefe debe dar explicaciones , eso es solo para los simples mortales.
Julio César, cuando entró en Roma, hizo que un soldado, mantuviese con el brazo, sobre su cabeza , una corona de laurel. Estaba cerca de ser nombrado Dios. Ya, emperador era una palabra que lo acercaba a los mortales, indignos de estar en su presencia.
Es así, todo el poder , enferma. En Argentina, es peligroso .
Detrás de las rebeliones hay varios motivos.
Una clase media que no puede tener seguro médico, que no puede enviar a los hijos a la escuela privada, que no pude conseguir un crédito.
No hay movilidad social como en décadas anteriores. Sin movilidad no tienen esperanza. Se aspira, siempre a que tus hijos les vaya mejor que a vos. Son los condenados al no crecimiento.
América Latina vivió de la suba de los commodities de la década anterior , una época de bonanza. Se terminó . La gente vive peor que antes. Muchos no quieren ser espectadores de un ingreso que no llega . Pocos se dieron cuenta de estas frustraciones y sus consecuencias.
Los planes de alivio tienen que llegar antes que explote la calle. Chile, además, era la meta del chavismo. Era el ejemplo neo-liberal, que había que torpedear. Había condiciones objetivas , pero se prepararon cientos de jóvenes para provocar el caos.
En nuestro país , todavía no hay plan.
El Ministerio de Economía , estará muy repartido , seccionado .
Eso nunca funcionó.
José Ver Gelbard , Juan Sourrouille, Domingo Cavallo y Roberto Lavagna , fueron superministros que por un tiempo pusieron los números en orden y alcanzaron crecimiento y baja inflación.
Los primeros 100 días son el 6 % de un mandato de 4 años. Esos días tendrán un significado simbólico . Serán un termómetro del poder.
Allí se sabrá si Alberto Fernández tiene posibilidades de sobrevivir a su propio entorno.
El turco Jorge Asís escribió : “Es imperdonable que el kirchnerismo duro movilizado por la ceguera del rencor, arrastre al peronismo hacia el fracaso”. Y todavía no asumieron.