El análisis que hacen de la derrota en el Instituto Patria, es interesante para conocer como pueden ser los próximos 2 años.
¿Quién es el dueño del fracaso?
Para ellos es el presidente de la Nación.
Se perdió por casi dos millones de votos y se dejaron en el camino tres y medio que sacaron en el 2019.
Alberto sabía que esto iba a pasar, por eso insistia que había que festejar un triunfo. Ahora dice que será candidato en el 2023. No está atacando, se esta defendiendo.
La única verdad para el kirchnerismo es la realidad de los votos.
Lo sumaron como candidato para ganar, ahora no solo no lo puede hacer, sino que se hunde en el fango, según la encuesta de ellos, tiene una imagen negativa del 62 %, y Cristina el 65 %. Pero la intención de voto 2023, Alberto 9 % y Cristina 18,8 %.
Llegamos entonces a la conclusión que tiene que volver Cristina.
El peronismo disciplinado fue vencido. Para ellos deben volver los dioses de la mitología kirchnerista.
Exigen, y lo lograron en estos 2 últimos meses que creciera el gasto público, que se mostraran hostiles en la negociación con el FMI y la pelea como forma ideal de la política.
Ahora el proyecto de Consenso Fiscal que impulsa el Gobierno abre puertas para que en 2022 las provincias aumenten gasto por encima de la inflación. Ingresos Brutos representa entre el 75 y el 80 % de los recursos propios de cada provincia. Pero es muy costoso para el aparato productivo argentino.
Todos saben desde hace décadas que contra más impuestos, más evasión, y elusión.
La presión fiscal en Argentina ya es muy alta. Promedia el 31 %, pero salta al 50 % sobre los que pagan impuestos. La presión tributaria en Argentina era del 20 % en el 2003.
Un nivel de esa naturaleza no les deja resto para seguir invirtiendo y crecer en sus actividades.
Trascendió que Ingresos Brutos castigará a la agricultura, ganadería, pesca y minería con 0,75 %; a la industria manufacturera con 1,50 %; a la construcción con 2,5 %; al comercio 5 %; los hoteles y restaurantes 4,5 %; las comunicaciones el 6 %; la telefonía celular con 7 %; la intermediación y servicios financieros con 10 %; las actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler con el 5 % y los servicios sociales y de salud 4,5 %.
¿Por qué es complicado tomar gente en blanco para reducir la desocupación y la pobreza?
Cada 1.000.- pesos que gana un trabajador, el empleador paga 1.500.- y el empleado recibe 800.- pesos.
Asi se explica que varios millones de personas trabajan en negro o gris.
Es historia, cada vez que modifican algo, es a la suba de impuestos porque hay que mantener un Estado enorme e inútil en muchos casos.
En el caso del impuesto a la herencia las provincias van a legislar un impuesto a los aumentos de riqueza que se consiguen a título gratuito.
Para las provincias, si el PBI crece, el gasto puede crecer en ese porcentaje.
Ahora, qué es lo que viene en economía.
Como ejemplo, vale lo que señala Carlos Acuña, uno de los tres secretarios generales que tiene la CGT.
Ante la caída del salario y teniendo en cuenta que el cálculo de la mayoría de los economistas apunta a una inflación del 60 % para el próximo año, pide llevar el salario mínimo , vital y móvil de 32.000.- a 150.000.- pesos.
Recordemos que entramos en un año donde las devaluaciones diarias se van a acelerar, habrá suba del gas, luz, nafta, gas-oil, transporte e impuestos.
Hoy estamos en un veranito de bonos, consumo y actividad poco sostenible en el tiempo.
Todos discuten si esto es un rebote, una recuperación o un crecimiento
Para la mayoría lo que viene es mucha inflación y suba del PBI, en el 2022.
Hoy, hay un festival de pesos que circulan y nadie quiere ahorrar. Se consume o se compran dólares en el mercado informal.
Llegamos a fin de año sin acuerdo con el FMI.
Todos, en la Casa de Gobierno y en Economía dicen que se va a firmar. El problema mayor es que nadie les cree.
Hoy el gobierno lo único que quiere es hacerse de mas dinero a través de los impuestos para sostener el gasto.
Nunca lo van a reducir.
Lo que no pueden lograr, es bajar la inflación.
Diciembre cierra a toda orquesta. El piso sería del 3,5 %.
Como decía un importante empresario : “No saber con quien reunirse para solucionar los problemas”.