No aprenden nada.

Pasan los años y no se aprende nada.

Pichetto, en el Congreso, dijo textual: “Con el superávit fiscal no se come.”
Gobernaba Macri, y la frase de la oposición en ese entonces era: “El asfalto no se come,” en referencia a las numerosas obras que se realizaban.

Son los mismos que gastaron e hipotecaron lo que había… y lo que no había.
Tuvieron resortes administrativos para distorsionar, extorsionar y corromper —por la vía de los recursos— a otros estamentos del Estado y de la sociedad civil que intentaron oponerse al despilfarro y al “plan platita”.

El despilfarro condujo a la pobreza.
Generó, por un momento, una falsa sensación de riqueza que terminó con un 48% de pobres.

Nada alcanzó: ni expropiar las AFJP, ni llevarse los dólares del Banco Central, expulsando a Martín Redrado de su presidencia.

Pero no aprendieron nada.
Con el superávit fiscal no se come, repiten.