La semana corta se presenta con colores oscuros.
El Papa te cierra la puerta y te dice: “No hay casi nada de qué hablar”. Se van tres ministros amigos al galope. Berni se empodera apoyado por Cristina y dice, de acá no me voy. ¿Qué tiene, que sabe, que conoce, que nadie lo puede tocar? ¿Tiene que ver con Nisman?
Los Mapuches que quieren un país independiente y quedarse con una porción de la Patagonia, traen más problemas.
Se acerca el 17 de octubre y todos quieren su acto lejos de los demás.
Máximo frente a los hombres grandes de La Cámpora, les dice: “Cristina está perdiendo la paciencia”.
Los datos de economía indican que se terminó la época buena.
¿Ah esto es lo mejor que tenían?
Se viene la recesión con inflación.
Muchos hablan del naufragio del populismo tarifario. Fernando Navajas señaló en una frase que se parece a una operación de abandono de un “Titanic” con la asignación de los botes salvavidas al final de un experimento que resultaba insostenible. No se alcanzó a verlo en el 2015, pero lo estamos viendo ahora, porque fueron tan ignorantes como para repetir la historia del atraso tarifario.
Ahora, están evacuando el barco en medio de la tormenta internacional en el precio de la energía.