El día después de mañana.
Se vota, y después ¿Qué se puede esperar de la economía?
Muchas palabras, inventos estadísticos, ilusiones y ponerse en campaña para noviembre.
Nadie espera que le digan la verdad. Esta muere en forma automática cuando un país entra en guerra o cuando un político está en campaña.
La realidad supera el relato.
Cifras oficiales del Indec.
Hace 4 años con un salario privado en blanco, comprabas un 40 % más de pan; 23 % más de leche y 60 % más de asado.
A pesar del rebote del 7 % del PBI para este año, estamos 4 % por debajo del 2019; la inflación está alrededor del 50 %; el sector privado perdió 157.000 trabajadores; los salarios en blanco 8 % menos y las jubilaciones 6 % de pérdida.
Los discursos se refieren al rebote estadístico con respecto a la brutal caída del 10 % del PBI en el 2020. Uno comprende que de “algo hay que agarrarse” para justificar un voto.
La falta de confianza se refleja en lo que pasa con los depósitos en dólares de los ahorristas.
En los bancos en cuentas corrientes o plazos fijos hay 16.400.- millones de dólares.
En las elecciones de agosto del 2019, los depósitos totalizaban 30.625.- millones. El temor a nuevos controles, cepos y a las políticas intervencionistas provocó una caída en los depósitos del 64 %.
La pandemia ayudó a cortar la sangría, pero los dólares se siguieron fugando al “colchón”.
Hoy, existen un millón de cajas de seguridad, el Banco Central calcula que hay 150.000.- millones de dólares.
Otra fantasía. Al cuidar la mesa de los argentinos le pusieron un cepo a la exportación de carne. El precio bajó 0,1 % en julio y 1,4 % en agosto. Pero aumentó 77 % en el año.
El presidente lo mostraba como un triunfo.
Otra discusión interminable fue la deuda.
¿Qué discuten?
Quien se endeudó más en dólares o en pesos.
Gastar es simpático, agradable. Distribuir el dinero que no es propio, muy político .
Ajustar es horrible. Pero después hay que pagar la deuda. Entonces nos rasgamos las vestiduras.
Hace bastante tiempo señalamos el peligro de las Leliq y los pases. Se deben 4 billones, 100.000.- millones de pesos. En 8 meses, los intereses fueron de 815.000.- millones. Resultado, cada 10 pesos que usted coloca en el banco, el Estado neutraliza nueve.
Conclusión : No hay créditos o son muy caros.
El gobierno anunció 12, 24 y 36 cuotas con un interés relativamente bajo comparado con la inflación.
Los bancos no tienen demasiado interés porque explican el atraso del 25 %. Tarifas atrasadas. Precios bajo vigilancia y dólar con un ancla, después de las elecciones, la inflación volvería a subir muy por encima del 3 % mensual. Por lo tanto, no es negocio para ellos este tipo de cuotas con ese interés. Por ejemplo, la tasa máxima de descuento que una entidad les cobra a los comercios para los pagos en 12 y 18 cuotas es del 11,48 y del 16,52 % respectivamente.
¿Qué hicieron?
Achicaron los cupos con tarjetas.
Si antes, por ejemplo, podias gastar hasta 150.000.- pesos, lo bajaron a 70.000.- pesos.
Ante las quejas, le ofrecen al cliente un préstamo personal, pero en este caso la tasa de interés se va por encima del 45 % con todos los gastos.
¿Por qué algunos candidatos en lugar de propuestas, dicen barbaridades?
Muy simple, porque no los conoce nadie.
Son desconocidos puestos a dedo, nunca construyeron poder. Por eso necesitan hablar de sexo, marihuana y otras yerbas, en medio de una población de 50 % de pobres y 15 % de indigentes.
Que Dios nos ayude.