La economía se fue a marzo.

Se cumplió un año de gobierno. Pasamos a mostrar las notas que sacaron en materia económica. Se fueron a marzo y con aplazó : inflación, 37 %; dólar, aumento de más del 100 %; desocupación, subió al 13 %; pobreza, se catapultó al 44,2 % y salarios que cayeron frente a los precios. Aprobó con un nueve la negociación con los bonistas y todavía está pendiente el examen con el FMI. Para Alberto, nos quedamos con esta frase : “Sin ella no sería presidente”. “Con ella, no puedo gobernar”. Todo el estilo de conducción está adaptado al arbitrario paladar de Cristina. La Cámpora es una agencia de colocaciones. Buscan encontrar la fórmula de un capitalismo tolerable. Odian lo que se llama clima de negocios. Por eso están eufóricos por el impuesto confiscatorio a la riqueza. Viven la ficción del izquierdismo de los 70. Alberto habla en privado de resistir al imperio para convencer a los jóvenes que está con ellos. Toda la riqueza hoy, es la máquina de fabricar dinero. Cristina hoy conduce los fragmentos de lo que alguna vez fue el peronismo. El ministro Martin Guzman planificó y puso en el papel alguna “hoja de ruta”, nunca lo llamó plan para presentar al FMI. – Pero, el problema es que no decide el presidente, en definitiva todo necesita la aprobación de Cristina. – La clave, y volvemos al mismo argumento que cuando el Senado decidió alterar la fórmula para ajustar jubilaciones. – La explicación en el Instituto Patria. – “Le dimos tiempo a Alberto. Le avisamos que íbamos a cambiar la fórmula”. – ¿Contestó el presidente? – “No, demoró y no hacia nada. Era evidente que no quería contrariar a Guzman, que había negociado esa formula con el FMI”. – “Por lo tanto lo hicimos”. – “Después dijo que el cambio se le había ocurrido a él ”. – ¿Sergio Massa lo sabía? – Estaba de acuerdo. El año que viene hay elecciones y hay cosas que no pueden pasar porque tenemos que evitar una derrota de cualquier manera”. – “No íbamos a asumir un costo político que no era razonable”. Ahora, aclaremos. Guzman no lo había decidido personalmente sin consultar. Todo fue trabajo de una comisión bicameral. Hablaron con expertos. Prácticamente la mayoría de los dirigentes del Frente de Todos lo aprobaron. Recuerda el ministro varios nombres : Santiago Cafiero, Cecilia Todesca, Fernanda Raverta, Sergio Massa, Jose Mayans y otros. Allí se aceptó el ajuste semestral de Guzman. Esto reducía la indexación de la economía. ¿Por qué se terminó de ponerle ácido a esa propuesta? La crítica de la vicepresidenta fue terminante. “El ajuste tiene un límite”. “No entienden que hay que tener más poder para conseguir los objetivos”. “El año que viene es electoral”. “Si no lo entienden, corre por cuenta de ustedes”. En ese momento, todos los que se lo  habían aprobado al ministro, dieron un giro de 180 grados. Guzman, piensa solo en el acuerdo con el FMI. Dice lo siguiente . Uno : “Al FMI no lo podes defaultear”. Dos : “El FMI te presta a tasas bajas”. Tres : “Tuve que explicar en el Instituto Patria que no podemos dar un portazo. Seriamos parias en el mundo. Querían romper con el fondo”. Cuatro : Como dice Angela Merkel, necesitamos recomponer la confianza en el mundo, para que lleguen los inversores. Cinco : “Tengo que elaborar una hoja de ruta o plan creíbles”. Seis : Necesita mostrar una política monetaria y cambiaria sostenible. Siete : Lo mejor para mostrar, el precio de los granos y la recuperación en Brasil, nuestro principal socio. Ocho : Con el FMI no sirve el “vamos viendo”. ¿Por qué señalamos paso a paso lo que sucedió con el aumento a los jubilados? Porque es una radiografía de cómo funciona el gobierno.