La pregunta lógica frente a tantos nombramientos en el Estado es la siguiente : ¿Hacía falta?
Por ejemplo : ¿era necesario nombrar como asesor en el Banco Central, a Aníbal Ibarra, expulsado como alcalde de la ciudad por la tragedia de Cromañón?.
¿Era necesario nombrar a Anibal Fernandez , el hombre que nos enseñó que la inseguridad es una sensación , como interventor en los yacimientos de Río Turbio?
Todavía está procesado por el plan Quintas y Fútbol para Todos.
En Río Turbio murieron 14 mineros por falta de mantenimiento .
¿Era necesario que Cristina públicamente pidiera la construcción de la ruta provincial 9.? Es una obra por la que se pagaron 525.- millones de pesos a Austral de Lázaro Báez, y nunca la termino?
¿Era necesario nombrar a Sabbatella para la limpieza del Riachuelo y a la esposa de Massa en Aysa?
Un viejo dirigente peronista, uno de los pocos que no tiene un cargo en el Estado, me dio una explicación.
“Todo esto, es una provocación necesaria para mostrar que en el poder se hace lo que se quiere”. “Es un mensaje al resto de la sociedad y también a la Justicia”.
“Casi todos los nombramientos vinieron de Cristina”, agregó . “Está claro, es un desafío a las investigaciones o juicios en curso”.
“Ella quiere que una gran manifestación la reivindique y la declaren inocente “. “ Está claro, no quiere pasar a la historia por el tema de la corrupción”.
Nombraron en un cargo importante a la esposa de Baradel. Está claro , se suspende la cláusula gatillo, para los docentes.
Por último : ¿Hacía falta que la vicepresidenta , declare que solo tiene un mono ambiente en Monserrat de 25 mts cuadrados, de 50 años de antigüedad?. Con el de Constitución , cuestan unos 50.000.- dólares . Declaro 3,7 millones de pesos, pero de ellos 2,6 millones son créditos de la AFIP. Su hija Florencia tiene 5 millones de dólares que estaban en una caja de seguridad. Solo efectivo, nada de bonos o plazos fijos. Máximo declaró 3,7 millones de dólares.
Será difícil armar todo esto, pero en nuestro país, sobra imaginación e impunidad.
En economía , sin mostrar ninguna carta , todos trascendidos , se espera llegar a un acuerdo por la deuda.
En política exterior, se hace equilibrio todo el tiempo.
El presidente busca resucitar la vieja idea de los 70: “ni yanquis , ni marxistas, peronistas”.
No hay guerra fría, y tenemos que negociar la deuda, eso lo limita bastante.
En el mundo somos un caso único. Alberto hace equilibrio entre Maduro y Donald Trump.
En Estados Unidos lo único que visualizan es si China va a invadir a nuestro país en el espacio de la tecnología y del 5G.
Este gobierno comenzó su gestión con el Grupo Puebla, una línea de izquierda agrupada en el Foro de San Pablo. Después anunció que se quedaba en el Grupo de Lima, muy crítico con lo que sucede en Venezuela.
EEUU mira con atención lo que hace Evo Morales en Argentina.
En el gobierno, los kirchneristas pedían derogar un decreto de Mauricio Macri que considera a Hezbollah como grupo terrorista. Otro sector del poder con Alberto y Felipe Solá, viajaron a sentarse a dialogar con el primer ministro Benjamin Netanyahu en Jerusalén.
Pragmatismo puro.
Si volvemos a la economía.
Uno : la inflación de enero 3 %.
Dos : Este número se dio con congelamiento del dólar, luz, gas, agua y servicios.
Tres : Se vienen malas noticias para los jubilados que no reciben la mínima.
Cuatro : En dos meses vendrán los impuestos recargados.
Una encuesta de D’Alessio – Berenstein , señala : De los que votaron a Alberto, uno de cada tres, dice que la economía está peor.
Eso sí, la película recién empieza.